Este perturbado hermanastro no deja de tener fantasías recurrentes con su hermanita menor, Eva. Hoy, algo ansioso y animado, aprovechando que mamá estaba ocupada en la cocina, pasó a molestar a su hermanita por su habitación. Cuando la vio en la cama recostada no pudo evitar llevar su mirada a su fabuloso y bien formado culo. Intentando molestarla, aprovecha la situación para meterle algo de mano a su culo. Pero su hermana lo rechaza y advierte que si mamá se entera estaría muerto. Pero él nota que su hermanita lo provoca, así que continúa insistiendo. Su hermana ahora parece disfrutar de ese juego de manos de gato y el ratón. Ahora su hermano, aprovecha y simulando que sigue jugando, le corre el short para espiar su pequeña concha desnuda que se veía claramente sin bragas. Él le hace prometer que estas travesuras deberían quedar en secreto, y continúa molestando a su hermanita. Ambos empiezan a jugar con fuego, y ahora el chico excitado le deja ver su verga. Para Eva, esa fue la verga más grande que alguna vez había visto, ella se sintió extrañamente excitada, y se dejó ir por el momento, y comenzó a mamársela con voracidad insaciable. Las cosas pierden el control, y ahora la hermanita no pararía hasta poder sentir la verga de su hermano en lo más profundo de su concha, y venirse una y otra vez. Aunque debía contener los gemidos para evitar que su madre los descubra. Pero tanta excitación puede terminar en un accidente, y el joven hermano terminó por venirse completamente dentro de su hermana
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