La primera cita con su chica, había terminado en su apartamento, con un encuentro apasionado, que lo dejó totalmente agotado, durmiéndose abrazado a ella. Pero su nueva novia tiene una debilidad que le avergüenza confesarle. Ella tenía el fetiche de tomarse toda la leche. A la mañana siguiente, el chico despierta abrumado y confundido, no sabía muy bien que era lo que estaba pasando, pero sentía una erección, mientras algo cálido y húmedo estaba envolviendo su verga. Abre los ojos y descubre a su reluciente novia chupándole la verga. Ella intenta explicarle que tiene una debilidad que es más fuerte que ella, y es tomarse la leche. Pero por vergüenza y temor, como había sido la primera noche, no se atrevió a pedírselo, ya que temía dar una mala impresión. Y por eso pasó toda la noche deseando tomarle su leche, y se durmió anhelándola saborear en su boca. Pero hoy ella despertó y lo vio desnudo, vulnerablemente dormido, y ya no pudo contener sus deseos de llevar su boca a su verga, y comenzar a chuparla suavemente. Ella jamás había experimentado despertar a un chico de esta manera. Comenzar a chupar la verga mientras él dormía inconsciente, y sentir como se iba poniendo dura en su boca, había resultado ser lo más excitante de su vida. Ahora ella le dirá su secreto, y es que, necesariamente, debía recibir, todos los días, su dosis de abundante leche. Y que por eso, de aquí en más, ella lo despertará de esta manera, para recibir su cálido alimento directamente de sus bolas a su garganta… Para dejarlo totalmente vacío, sin una gota de leche
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