El fantasma que habita mi hogar! Sub Esp

Lo peor que nos puede pasar es mudarnos a una nueva casa y descubrir que está poseída por una entidad. Nehitan acaba de alquilar un nuevo apartamento, pero desde que entró allí sintió algo extraño, un escalofrío comenzó a recorrer su cuerpo. Al pasar los días ha visto como algunas cosas de la casa parecían moverse, y en las noches escucha gemidos extraños de lo que parece una mujer. La situación ya lo tiene desbordado y cree que tal vez se está volviendo loco. Pero hoy el fantasma finalmente se manifestó dejándose ver ante sus ojos. Ella era una mujer joven y sensual, que había fallecido repentinamente, y qué había quedado perdida en el lumbral de ambos mundos, atrapada aun por un deseo carnal que no le ha permitido liberarse del mundo físico. Sus necesidades sexuales la convirtieron en una entidad sedienta de sexo, que puede ser capaz de venirse una y otra vez, y bañar a sus víctimas con sus abundantes jugos vaginales. Hace demasiados años que nadie llega a la casa, y por ello se manifiesta frente a su víctima sedienta de un apetito voraz... Al verla, Nehitan cae hipnotizado con su belleza como si se tratase de canto de sirenas. Su voluntad rápidamente se quiebra, apenas puede creer que ella esté frente a sus ojos, y que además se sienta tan real. Ella no duda en seducirlo y mostrarle que tan real, y para ello va directo y le hace una mamada increíble, solo para terminar de envolverlo en su hechizo. Pero esto es solo el comienzo, porque ahora ella liberará su verdadera naturaleza, y no parará de cogerlo hasta saciar sus necesidades de acabarse una y otra vez sobre su víctima empapándolo totalmente con sus jugos. Seduciéndolo aún más y más con sus apasionados gemidos rogándole por su verga.  Su macabro hechizo le da a Neihitan un placer con jamás creyó conocer en este mundo físico. Su vagina era perfecta, y él podía hundir su verga una y otra vez hasta el fondo, y mientras ella gritaba de placer, al mismo tiempo él podía sentir como se contraía su concha y apretaba su verga y lo envolvía totalmente. Y cuando ella acababa, podría sentir las fuertes contracciones vaginales, y el cálido jugo escurriendo y bajando por su verga. Sus jugos vaginales eran tan ricos que era un placer saborearlos en su boca. Envuelto en este sueño o pesadilla, ella solo quería una cosa, sentirse viva

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